jueves, 20 de octubre de 2011

Turquía pasa la frontera iraquí para responder al ataque masivo del PKK

24 SOLDADOS TURCOS MUERTOS EN LA OFENSIVA KURDA

En el mayor ataque en dos décadas de la resistencia kurda el Ejército turco, el PKK dejó ayer al menos 24 soldados muertos y 18 heridos. Ankara respondió rápidamente a la ofensiva cruzando la frontera con Irak para atacar a los rebeldes kurdos con cientos de soldados de élite y la aviación. El PKK advirtió de que aumentará sus ataques si el Ejército turco traspasaba sus fronteras, mientras Ankara amenazó con consecuencias para el movimiento político kurdo.

p005_f01_199x116.jpg

Varios ataques simultáneos del PKK a unidades militares turcas dejaron al menos 24 soldados muertos y 18 heridos en la madrugada de ayer. La respuesta inmediata de Ankara fue entrar en el sur de Kurdistán, tras la frontera con Irak, y atacar zonas kurdas en combates que también dejaron 23 muertos según fuentes militares turcas.

El ataque kurdo obligó al primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, a anular una visita a Kazajistán. Tras una reunión de urgencia con varios ministros y responsables militares, Erdogan confirmó que tropas de élite traspasaron la frontera «como permite el derecho internacional» y describió «operaciones de envergadura» en la frontera iraquí contra posiciones del PKK. El presidente turco, Abdullah Gül, advirtió de que «la respuesta será una venganza grande y múltiple».

El PKK reivindicó los ataques, que calificó como una respuesta a la represión del movimiento kurdo por parte del Estado truco y a los bombardeos de la aviación turca en Kurdistán sur. Elevó a un centenar el número de soldados turcos muertos. Además, lamentó la muerte de cinco de sus combatientes en los ataques, uno de los más duros en los últimos veinte años. Los ataques se produjeron en ocho puntos diferentes en las localidades de Cukurca y de Yuksekova, en la provincia de Hakkari.

Tras ellos unos 600 soldados turcos penetraron hasta cuatro kilómetros en Irak para impedir el repliegue a sus bases, a la vez que la aviación bombardeaba sus posiciones en las regiones de Qandil y Zap, según las fuerzas de seguridad turcas.

La agencia kurda Firat confirmó que cazas turcos despegaron desde la base aérea de Diyarbakir y bombardearon diversos campamentos del PKK. De los soldados desplazados, entre 300 y 400 hombres proceden de las fuerzas turcas permanentemente estacionadas en el interior de Irak desde la década de 1990.

El portavoz del grupo armado kurdo Ahmed Deniz advirtió de que el Ejército turco «será atacado aún con más fuerza si intenta llevar a cabo operaciones militares fuera de sus fronteras».

Amenazas al BDP

El primer ministro turco advirtió que quienes apoyan al PKK desde el exterior «pagarán por ello» y denunció a quienes «se pasean del brazo con los terroristas» y «no condenan el terrorismo» en referencia al Partido de la Paz y la Democracia (BDP).

Precisamente, una redada policial detuvo el martes a 78 militantes, cargos electos de organizaciones kurdas y numerosos estudiantes. El copresidente del BDP, Selahattin Demirtas, exigió al gobierno y al PKK que detengan la guerra e inicien un proceso de paz.

El pasado martes murieron cinco policías y cuatro civiles en un ataque atribuido a rebeldes kurdos en Bitlis. La aviación turca bombardea regularmente los refugios del PKK en las montañas del sur de Kurdistán, tras la frontera con Irak, pero Ankara añade incursiones terrestres para acabar sus operaciones.

Los ataques del PKK recibieron las condenas del presidente de EEUU, Barack Obama -que aseguró que continuará su apoyo a Turquía frente a «la amenaza terrorista del PKK»-, el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, así como los gobiernos alemán y español, y el presidente de la región autónoma de Kurdistán en Irak, Massud Barzani.

«Apoyamos una solución pacífica»

El Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) aseguró ayer que «apoya una solución pacífica al conflicto» con Turquía, pero que si el Ejército turco no cesa sus ataques se defenderán. En declaraciones telefónicas a Efe, el responsable de Relaciones Exteriores del PKK, Farhan Omar, insistió en que la voluntad de su grupo es proseguir con «la lucha con todos los medios pacíficos y en legítima defensa». «Si el ejército turco cesa sus ataques contra el PKK, nosotros cesaremos nuestros ataques, y si no, responderemos en defensa propia», advirtió. El dirigente kurdo denunció, además, que, aunque el PKK «ha decretado más de nueve altos el fuego unilaterales» desde que comenzara su actividad en 1984, el Estado turco nunca ha dejado de atacar al grupo.

Omar recordó las demandas de la liberación del líder histórico del PKK Abdala Ocalan y de miles de presos kurdos, así como que las tropas turcas dejen de atacar en las regiones de población kurda, para poder alcanzar una solución al conflicto. GARA


No hay comentarios: