En el artículo Economic Apocalypse Goes Mainstream se dijo ya que los colapsos financieros, económicos y políticos que están ocurriendo en todo el mundo eventualmente llevarán a las naciones industrializadas del mundo a la próxima guerra. Los signos ya deberían ser evidentes para todos, especialmente en áreas como Oriente Medio, donde los EE.UU. están compitiendo por el dominio de los recursos, la superioridad monetaria y el control político. Mientras las economías de todo el mundo implosionan y los ciudadanos están cada vez más frustrados con sus gobiernos, las cosas rápidamente pueden comenzar a salirse de control en los países - sin importar si usted está en los Estados Unidos, China, Rusia o Europa. Como resultado, los políticos harán lo que han hecho históricamente en estos casos, que es desviar la responsabilidad (ya sea por miedo o planificadamente) de sí mismos a los demás. Por lo general, esto significa que a líderes políticos y ciudadanos a océanos de distancia se les echará la culpa del malestar.
Aaron Hawkins de The Gathering Storm Nubes ( en español: Las nubes de tormenta que se están reuniendo) ofrece algunas ideas clave en las muchas variables que en última instancia, conducirán al mundo tal vez a la mayor guerra de la historia.
Cuando se juega al ajedrez el resultado del juego se determina generalmente en las primeras etapas por las posiciones que se construyen por cada jugador, incluso antes de que el primer peón caiga. Estos movimientos pueden parecer inocuos para el ojo inexperto, pero un jugador experimentado puede leer las amenazas que crecen y se desarrollan en cada etapa. Ellos pueden ver las trampas que están siendo colocadas.
En este momento, las naciones del mundo se están organizando y posicionando - económica, diplomática y militarmente - para una lucha que va a alterar la estructura del poder mundial de manera irrevocable.
Sería imposible entender el colapso económico que se está desarrollando y la gran guerra que casi seguro seguirá a este, sin tener en cuenta los retos de este juego de ajedrez global.
La Tercera Guerra Mundial no va a ser un accidente. No va a ser causada por una cadena de eventos desafortunados que los EE.UU. se esfuerzan por evitar. Es una meta, un objetivo específico que debe ser alcanzado con el fin de forzar un cambio cultural que la población de otra forma nunca aceptará. Es sólo a partir de este contexto que el desarrollo de los acontecimientos en el mundo en este momento tiene algún sentido.
Aunque no podemos predecir con exactitud cómo o cuándo una guerra tomará forma, debe quedar claro que el juego en el gran tablero de ajedrez está en pleno apogeo. Los actores principales - que incluyen a líderes nacionales y los agentes de élite en el poder detrás de la cortina - están de forma activa posicionando sus piezas, tal como lo hicieron en las dos décadas anteriores a la Primera Guerra Mundial y la Segunda Guerra Mundial.
Sobrevivir a un colapso económico y a la inestabilidad política puede ser el menor de nuestros problemas.
Sobrevivir a un colapso económico y a la inestabilidad política puede ser el menor de nuestros problemas.
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